La obesidad es considerada una enfermedad y se caracteriza por la acumulación excesiva de tejido adiposo en el cuerpo, aumento de peso y todas sus consecuencias.

Consecuencias de la obesidad infantil

•  Cambios psicológicos, ocurren temprano en la vida e incluyen: baja autoestima, bajos resultados en el colegio e introversión, a menudo seguida de rechazo social.
•  Cuestión física; aumento del riesgo de desarrollar enfermedades o condiciones patológicas y pueden ocurrir en la edad temprana, pero en general aparecen en la edad adulta como consecuencia de la obesidad: aumento en la presión arterial (hipertensión), aumento de los niveles del colesterol general (hipercolesterolemia), especialmente del “colesterol malo”, altos niveles de insulina en la sangre (hiperinsulinemia), problemas respiratorios al dormir (apneas de sueño), problemas ortopédicos, especialmente de articulaciones.

20 pasos para un tratamiento exitoso.
Sigue estos consejos que han probado ser efectivos para evitar el sobrepeso en los niños:

1.    Pérdida de peso con un adecuado programa que incluya alimentos “reales” a su gusto y condición social y que no aumenten su ansiedad por la comida.

2.    Realizar un tipo de ejercicio que le permita perder grasa pero no músculo porque se detendrá su crecimiento y se alentará su entrada a la pubertad.

3.    Cuidar que su crecimiento nunca se detenga, la dieta debe ser hipo energética pero siempre permitiendo su adecuado desarrollo.

4.    Aprender de los padres costumbres de alimentación (orden, cantidad, calidad, tiempos de comidas y hábitos de higiene y cuidado de la salud).

5.    Limitar el tiempo de recreación de televisión, computadora y videojuegos a menos de 1 hora al día, y evitar el sedentarismo.

6.    Los padres serán los responsables de las opciones que los hijos tengan en casa y fuera de ella.

7.    La alimentación deberá ser variada para que sea muy nutritiva.

8.    Es necesario enseñarles a tener una dieta equilibrada (que contenga un alimento de cada grupo de los presentes en el plato del bien comer).

9.    Preferir alimentos caseros y preparados bajo supervisión, que industrializados.

10.    Incluir frutas y verduras en todas las comidas.

11.    No premiar con alimentos.

12.    Incluir a los niños en la selección y preparación de los alimentos.

13.    Tener una dieta familiar congruente, los niños no pueden comer una ensalada mientras los padres saboreamos unos tacos dorados.

14.    Cuidar mucho el tamaño de las porciones.

15.    Utilizar productos lácteos bajos en grasa que contengan la misma cantidad de proteínas y calcio que los enteros.

16.    Promover refrigerios saludables cada 3 o 4 horas, como fruta, verdura y galletas integrales.

17.    Revisar nuestros hábitos, nuestro peso y nuestra relación con la comida, todo esto es transmitido de manera inherente a nuestros hijos.

18.    Tener comidas familiares regulares para promover la interacción social y modelar el papel de la conducta relacionada con la comida.

19.    Con pequeños cambios en los niños, se logran grandes avances, pues ellos están en periodo de crecimiento.

20.    Es muy importante siempre recalcar la importancia de tener un peso adecuado por la cuestión de salud y cuidar mucho los comentarios, juicios o críticas para el niño, pues es una etapa definitiva en la construcción de su autoestima.